ESQUINA "LAS GRADILLAS"
Esquina Las Gradillas (Calle Ricaurte con calle Sucre)
Refiere Pedro Laprea Sifontes, que en la esquina formada por la intersección de las calles Sucre y Ricaurte, existía a comienzos del siglo veinte, una solariega casona de adobe, anchos portones de madera y techo de tejas, donde funcionaba una pulpería llamada Las Gradillas, propiedad de Don Pedro Vicente Cuenca, quien se estableció en el lugar en el año 1908. No se sabe el origen del nombre del conocido lugar; bien pudiera ser una réplica de la caraqueñísima esquina de Las Gradillas (situada al Sureste de la Plaza Bolívar de la capital de la República), en donde se reunían los Patiquines y Cucarachones de finales del siglo XIX y principios del XX, para Florear (galantear) a las damas cuando salían de las misas dominicales de la catedral de la ciudad en tiempos de Guzmán Blanco, Castro y Gómez. Aquí en San Fernando, Cuenca estableció su negocito de víveres al detal, donde los vecinos hacían sus compras diarias, sin hacer mayores comentarios acerca del nombre de su pulpería Las Gradillas. Después estuvo un señor llamado Roque Marchena con su empleado Leonardo Aponte, apodado cariñosamente El Chingo. La entrada principal de la casa estaba representada por un enorme y resistente portón de gruesa madera, el cual estaba ubicado por la calle Ricaurte.
Esta edificación fungía como residencia familiar y negocio, el cual estaba precisamente en la esquina y como toda pulpería tenía hacia la calle principal (calle Sucre) dos portones y uno por la transversal (Ricaurte). En esa vieja casona funcionó la desaparecida Comisión Nacional de Abastecimiento, una especie de MERCAL, con la finalidad de vender los productos de la dieta básica a un precio menor que el establecido en el mercado local. Fue en el año 1947 que el comerciante Rafael Requena, apodado Rollón, compra la casa a la viuda de Don Esteban Vivas.
"Posteriormente Rafael Requena compró a la viuda de don Esteban Vivas. Para esa época vivían allí Esteban Vivas (Estebita) y Santiago Bravo, quienes se alzaron con la casa, y Requena para posesionarse de la misma tuvo necesidad de dirigirse a Don Rafael Bolívar, con el encargo de que le hiciera una carta al Prefecto de la época, que era el coronel Ángel R. Mora. Éste al leer la carta conminó a Bravo y a Estebita a desocupar la vivienda, quienes llamaron a Requena y se la entregaron"
FUENTE: Tomado del articulo ANCESTRALES ESQUINAS DE SAN FERNANDO DE APURE de Hugo Arana.





agosto 28, 2020


0 comentarios:
Publicar un comentario